África esconde misterios verdaderamente increíbles que nos harán repensar muchos de nuestros actuales esquemas vitales. Pero también esconde pobreza, dolor, llanto, desesperación y muerte. Para los que quieren descubrir esos misterios sin ignorar el sufrimiento es este blog.

miércoles, 3 de febrero de 2010

La poesía es mágica

Recientemente he leído en un prestigioso periódico dos noticias relegadas a la página 41, sección "Vidas y Artes", cuando en realidad, y por su importancia, debieran haber sido noticia de portada acompañadas de artículos de expertos que ofrecieran un largo análisis. En una de ellas el titular decía así: "Los Gates donan 7.000 millones a la OMS para vacunas". Y el texto íntegro de la noticia era el siguiente: "La Fundación Bill & Melinda Gates ha anunciado que donará 10.000 millones de dólares (7.000 millones de euros) en 10 años a la Organización Mundial de la Salud para vacunas. El objetivo es salvar a ocho millones de niños".

La siguiente noticia se presentaba con el siguiente titular: "Premio Fronteras a la Universidad de Nueva York", y en el cuerpo completo de la noticia se leía: "El Instituto de Investigación de Desarrollo (Universidad de Nueva York) ha recibido el Premio Fronteras del Conocimiento de la Fundación BBVA por identificar científicamente las carencias de la cooperación internacional a gran escala".

Imagino que el director del medio tiene muy clara su línea editorial, y también que es perfectamente consciente de que para una noticia relacionada con la cooperación pueda ir en portada debe llevar aparejada, inequívocamente, una catástrofe de gran magnitud, de lo contrario hemos de dejar que sean el grueso del periódico y la propia actualidad, quienes marquen la pauta a seguir. Y esto es lo triste, que los seres humanos nos movamos por impulsos y no seamos capaces de mirar lo que tenemos a nuestro alrededor, de ver lo que tenemos muy cerca y atisbar lo que hay lejos para incluir, lo uno y lo otro, en nuestras diferentes listas de prioridades.

No conozco a muchas personas que donen alegremente siete mil millones de euros para ningún tipo de causa solidaria, por eso no entiendo que el hecho de que alguien sí lo haga no sea motivo de fiesta periodística con formato de noticia principal. Tal vez la respuesta a este casi silencio informativo es que, los que piensan y deciden si merece la pena ser citada, entienden que como Bill Gates ya gana mucho dinero por su posición dominante en el mercado, lo menos que puede hacer es dar parte de sus beneficios a causas solidarias. Pero no es así, hay millones de personas ricas en el mundo que no distribuyen ni un céntimo de sus ganancias entre los más necesitados. Y también hay muchos más millones, la inmensidad de la población media mundial, que pudiendo dar algo, o simplemente pudiendo ayudar de cualquier manera, aunque no sea con dinero, no lo hace porque no lo siente, no quiere o, en la mayoría de los casos, se esconde tras los recurrentes "no doy nada porque no me fío de las ong’s" o "no doy nada porque quienes lo tienen que solucionar son los gobiernos".

La otra noticia, la que se recoge el premio de la Fundación BBVA al Instituto de Investigación del Desarrollo de la Universidad de Nueva York por identificar científicamente las carencias de la cooperación internacional a gran escala, puede que fuera valorada bajo el prisma empresarial de "el que quiera publicidad que la pague", y como en este caso hablamos de un banco a lo mejor lo pensaron con más razón. Pero tampoco es así. Independientemente de la entidad que concede el premio, me parece de vital importancia que los lectores de prensa, y todo el mundo, sea consciente del fenomenal trabajo realizado por los investigadores norteamericanos y que, con los resultados de ese trabajo, los gobiernos del mundo se pongan manos a la obra para corregir una dinámica equivocada que parece no tener fin. Y por supuesto me encanta el hecho de saber que hay expertos científicos que se levantan por la mañana pensando en cómo ayudar a mejorar la Humanidad.

Debemos ser capaces de empezar a resaltar en nuestras vidas las cosas que de verdad importan, como con buen criterio defiende el filósofo francés Edgar Morin en su artículo "Elogio de la metamorfosis", publicado precisamente en El País, el mismo periódico que en este caso ha optado por ningunear dos noticias de gran calado: "La orientación despliegue-repliegue significa que el objetivo ya no es fundamentalmente el desarrollo de los bienes materiales, la eficacia, la rentabilidad y lo calculable, sino el retorno de cada uno a sus necesidades interiores, el gran regreso a la vida interior y a la primacía de la comprensión del prójimo, el amor y la amistad". Y al leer esto me pregunto, ¿cómo es posible que un medio de comunicación, que ofrece una página completa a un pensador que escribe sobre la necesidad de la primacía de la comprensión del prójimo, luego menudee espectacularmente las noticias que no son otra cosa que el fruto de la línea de pensamiento de ese pensador? La respuesta en ningún caso debe ser causa de hostilidad contra el medio en particular, porque lo hacen todos, y yo como periodista también lo he hecho, sino que más bien hemos de empezar a darnos cuenta que es obligado dar un giro radical a lo que hasta ahora considerábamos importante para concentrarnos en una realidad que difícilmente acepta disquisiciones.

En otro periódico, esta vez en El Mundo, he leído una entrevista de Antonio Lucas al poeta Francisco Brines, que vive retirado en un caserón familiar de Oliva (Valencia). El poeta manifiesta que defiende la poesía como un misterio "Uno habla desde dentro y se asombra de lo que encierra ese decir. Eso es la revelación. La poesía es mágica en tal sentido y convierte a quien la hace en un médium de sí mismo. El papel en blanco es un espejo al que uno se asoma para retratarse siempre, como un método de conocimiento, porque saca cosas de nosotros que desconocíamos por completo". Hagamos caso al poeta, sentémonos delante de un papel en blanco, convirtámonos en médium de nosotros mismos y escribamos todo aquello que tal vez ni sabíamos que llevábamos dentro en relación a los demás, a lo que creemos que podemos hacer, y sobre todo en relación a nuestro yo, el único con capacidad para decidir si queremos ser protagonistas de nuestra propia noticia sobre cooperación y ayuda solidaria y el tamaño que creemos que deben darle en los medios de comunicación.

Gandhi dijo: "Tú mismo debes ser el cambio que deseas ver en el mundo". Hazlo ahora, en este preciso momento. Déjate llevar. La poesía es mágica.